Desde aquel año, he comprendido lo que conlleva la vida y la muerte... sé que es el único destino seguro que tenemos, sin embargo, aún me cuesta trabajo asimilar que el tiempo pasa de prisa, que de pronto una persona que no has visto en años o apenas hace un instante puede que no la vuelvas a ver jamás... tan así de golpe. Con experiencias como esa es cuando me doy cuenta que el tiempo no se desaprovecha, pues si nos mantenemos en el ayer o en el mañana, nunca llegaremos a vivir como tal; nos convertiremos en recuerdo o en anhelo pero no somos, no existimos...
El mundo no se detiene ni se detendrá con la muerte de alguien, incluso si el mundo muere y nosotros con él, los demás planetas seguirán girando y el sistema actuando como hasta ahora. Pero, en universos más pequeños ¿Qué sucede? ¿Cuánto tiempo está permitido para tanta tristeza?...
