Es el viento nocturno
la serenata privada
de los amantes que
hacen de la poesía
movimiento, dicha y cansancio//
Lienzo de misterio;
un manto, en ausencia de luz,
que cubre las ruinas
de un futuro no contado,
aún no soñado,
o siquiera imaginado//
Cielo negro; un eco
de los gritos que
derivan de las pesadillas
en alguna infancia//
La luna como mujeres de Gelman;
dispuesta a escuchar entre susurros
la rima XIV de Bécquer,
dejándose más desnuda
que aquella maja pintada
en un cuadro de Goya//
Acaso las estrellas
el gesto amable de un padre,
o la inocencia premeditada en
las historias que se leen
para conciliar los sueños;
transformadas con el tiempo
en la fina lectura de los cuerpos//
Es la noche vigilia
de una memoria guardada
en un jardín, donde las flores
permanecen monocromáticas
hasta iniciada la mañana//